La unión hace la fuerza. Un refrán que siempre hemos escuchado y que estos días se está cumpliendo al pie de la letra.

Y es que, por fortuna para la mayoría, desde que empezó la ola del coronavirus a nivel mundial, son muchos los actos de bondad que se han podido ver a través de las redes. Generosidad que sorprende al mundo y es claramente un salto de fe hacia la humanidad.

Actos como ayudar a la tercera edad a hacer sus mercados, compartir alimentos y ser recursivos para ayudar a los demás destacan mucho hoy en día. También ha habido mucha unión ciudadana a la hora de hacer mascarillas caseras, así como otro tipo de material sanitario como los respiradores, y entregarlo a los hospitales y centros de salud.

Es aquí en este último punto donde cabe resaltar la creatividad de muchos en su máximo esplendor. Pues el estar encerrados tanto tiempo en casa ha aportado también cosas positivas. Son muchas horas las que tenemos para pensar y para emplear en todo tipo de arte. Han surgido canciones y han nacido todo tipo de iniciativas solidarias, desde conciertos hasta webs para fomentar la lectura. En definitiva, la gente ha sabido extraer el jugo de la situación para aportar cosas positivas.

Claro que no está de más resaltar que gracias a la situación por la que estamos pasando, hay menos transportes y menos producción. En los países paralizados o que funcionan a media máquina por el coronavirus, la población respira mejor gracias a una reducción de la contaminación atmosférica, un aspecto muy bueno si lo vemos con ojos de positivismo.

¡Junos hacemos la diferencia! Y aunque el coronavirus nos ha encerrado en nuestras casas, es claro que estas medidas están sacando lo mejor de la humanidad y reconstruyendo un planeta que tal vez ya necesitaba un respiro.

Hoy, concluimos con que a todo se le debe buscar un lado bueno, incluso a las pandemias. Así lo afirman psicólogos y psiquiatras, que piden a todos un esfuerzo por tratar de extraer la parte positiva de todo esto. Sacamos lo mejor de nosotros en situaciones difíciles, uniéndonos por un bien común para ganar la batalla contra un enemigo invisible.